¿Cómo diagnosticamos el dolor de espalda?
Cerca de la mitad de todos los estadounidenses que trabajan admiten tener síntomas de dolor de espalda cada año, lo que representa más de 250 millones de días de trabajo perdidos por año. Los expertos estiman que hasta el 80% de la población experimentará dolor de espalda en algún momento de su vida. La radiografía y la tomografía computarizada son muy eficaces para diagnosticar fracturas y enfermedades degenerativas del disco, mientras que la resonancia magnética es el estándar de oro para obtener imágenes de la columna, ya que proporciona información valiosa no solo sobre los huesos, sino también sobre los tejidos blandos.
¿Cuáles son algunas de las principales causas del dolor de espalda?
La causa más común de dolor lumbar es la enfermedad degenerativa del disco o la degeneración de los discos intervertebrales relacionada con la edad y la estenosis espinal (estrechamiento del canal espinal). Las hernias de disco y las fracturas por compresión después de un trauma también son comunes. Otras patologías incluyen pinzamiento de nervios (ciática), fracturas por estrés, artritis de las articulaciones facetarias, desgarros de ligamentos, desgarros musculares y espasmos musculares.
¿Qué puede hacer alguien para ser preventivo?
Hay muchos pasos proactivos que se pueden tomar para evitar los síntomas recurrentes. Estirarse antes y después de una actividad física extenuante y hacer que los estiramientos de espalda o el yoga formen parte de su rutina diaria es una forma de prevenir problemas. Asimismo, es muy importante tener un estilo de vida activo y evitar el exceso de peso corporal. Ciertos alimentos y suplementos dietéticos como la cúrcuma pueden tener propiedades antiinflamatorias. Otras cosas a tener en cuenta incluyen desarrollar un núcleo fuerte, usar calzado adecuado, seguir una dieta no inflamatoria y dormir lo suficiente, lo que incluye encontrar un colchón y una almohada que se adapten a su biomecánica y le permitan un sueño reparador y cómodo.
¿Con qué frecuencia se necesita cirugía y cuáles son algunas otras opciones?
Siempre les digo a los pacientes que la cirugía de espalda debe ser el último recurso después de que todas las demás opciones de tratamiento hayan fallado. Existen muchos casos de “cirugía de espalda fallida” o dolor persistente a pesar de la cirugía e intervenciones invasivas que pueden derivar en complicaciones y problemas futuros. A veces, sin embargo, es inevitable. Hay muchos otros tratamientos que debe probar primero, incluidos medicamentos antiinflamatorios, fisioterapia, ajustes quiroprácticos, inyecciones epidurales, cifoplastia para fracturas por compresión, rizotomía facetaria y ablaciones nerviosas.
Brett Helfner, MD es un radiólogo especialista en imágenes musculoesqueléticas y corporales aquí en Zwanger-Pesiri Radiology.